Educación emocional

¿Se puede educar sin castigar?

By 5 octubre, 2016 noviembre 9th, 2019 19 Comments

19 Comentarios

  • MAR dice:

    A mí no me funciona ningún castigo. Lo he probado de todas las formas posibles. Si le castigo sin ver la TV, monta en cólera y al rato se va a otra cosa. Varias veces, incluso le he amenazado (y cumplido, porque alguien me dijo que si digo algo tengo que ser consecuente con lo dicho), con tirarle los juguetes a la basura y al final él ha venido a ayudarme a tirarlos a la basura.
    Tengo que probar otros métodos. Pero estoy bloqueada. Intento empatizar con él pero no lo consigo. Pues cuando me siento a su lado y le hablo, él coge y se va hacia otro lado o me gira la cabeza y me da la sensación de que no me escucha.
    En fin, seguiré intentando empatizar con él, pero reconozco que es muy difícil.
    Gracias Olga por tu blog.

    • Olga Marín dice:

      Empatizar puede llegar a costar mucho, pero lo que desde luego no funciona, como ya has comprobado en primera persona, son los castigos. Ánimo, Mar, seguro que poco a poco consigues encontrar formas mejores.
      Un abrazo!

  • Mónica dice:

    Lo cierto es que utilizo muy a menudo la palabra castigo, y no creo que sirva de mucho. Pienso que igual sería mejor llamarlo consecuencias, por ejemplo, no has recogido tu habitación, en lugar de castigarte sin ver la TV, no la verdad hasta que la habitación esté recogida, porque todo tiene un orden, así, cuanto más tardes en hacer lo que se espera, más tardarás en tener lo que tú quieres… ¿Estaría bien planteado?

    • Olga Marín dice:

      Puedes probar, pero si lo llamas consecuencia y es un castigo real tampoco servirá de nada. Es decir, yo te pido que recojas porque el orden es importante para mí y te pido que colabores. Cuando hayas recogido podrás ver la tele, pero por supuesto puedes decidir no recoger, es decisión tuya. ¿Me explico?

  • Patricia dice:

    Buenos dias
    Yo tengo dos niños de 6 y 4 años muy diferentes entre sí.
    El mayor es un niño con el que se puede hablar,si le explicas las cosas con calma él puede entenderlas y gestionarlas como a todos y todas nos gustaría que se comportara un niño (no es pasión de madre,es la realidad) y el pequeño tiene un carácter fuerte,me desafía y me reta,continuamente.
    ¿quiero yo cartigar ? pues obviamente no,pero mi realidad es que habiendo practicado el mismo estilo de crianza con los dos,en el mayor el dialogo ha funcionado y al pequeño hasta que no le retiro algo que le guste mucho no capto su atención.
    Con lo cual creo que la teoria general está muy bien pero al final cada uno de ellos tiene personalidad y eso también pesa.

  • jose manuel dice:

    No entiendo nada, ¿quien educa al padre? cada uno venimos con nuestro librillo aprendido, de aquellos que fueron nuestros modelos, los hemos repasado e incluso mejorados sustancialmente, seguimos modelos contemporáneos en nuestro dia a dia e incluso vamos a clases de ser padres, pero nadie me dice que hacer, cuando un adolescente- adulto se niega a dialogar con su padre, cuando se niega el cariño a su padre, o cuando cuando se intenta razonar con ellos se plantean echarte de su habitación y de su vida, cuando no comparte un solo minuto contigo ni habla contigo mas que monosílabos, mi pecado es despues de explicar que una cosa esta mal, vuelve a hacerla y tras varias veces queriendo saber porque lo hace, vuelve a repetirla, eso si su madre lo aprueba todo, no aprueba la consecuencia o el castigo, e incluso aprueba todo aquello que esta mal. ¿que hacer?

    • Olga Marín dice:

      José Manuel, veo complicado responderte en un espacio tan pequeño. En primer lugar, la adolescencia es una edad complicada en que la necesidad de separación de los padres, unida a los propios cambio (físicos, cognitivos, emocionales, hormonales) del chico pueden llegar a ser muy complicados de gestionar para toda la familia. Pero también toca preguntarse qué hemos hecho antes como padres, es decir, durante la infancia. Yo no conozco vuestra historia, si quieres enviarme un mail en privado, podré darte más pistas.
      Un abrazo!

  • Nur Banu dice:

    Estoy de acuerdo con la teoria y con mucho de lo que se dice en los comentarios, pero a veces mi pregunta es: ¿cómo diferenciar un castigo de un acuerdo o un chantaje? TE cuento mi situación concreta:
    Mi hija de 3 años y medio ha empezado a desafiarme de forma intensa y ante situaciones concretas (darle la teta a su hermana, o hablar con mi compañero o tratar de hacer algo por mi y para mi) se pone muy nerviosa, comienza a destruir, ha empezado a insultar (algo que antes nunca) y el otro día hasta me rasguñó la cara. Hablamos mucho sobre la atención, sobre los límites físicos y emocionales, explicarle que el amor llega para todos… y a veces progresa a veces vamos a peor. Hace poco llegamos al acuerdo de que si pegaba o insultaba, es decir, que si faltaba al respeto, yo no iba a darle teta, porque no sentía ganas. Ella dijo que estaba de acuerdo, vale. Llevamos tres dias que ella, a ratos, ella me pregunta ¿estoy respetando? Y entonces me cuestiono sobre si lo nuestro fue diálogo, límite o un castigo encubierto…
    Saludos y gracias por acompañarnos.

    • Olga Marín dice:

      No hay una respuesta fácil, es lo que tú sientas que está bien para ti. Dejar de darle teta, ¿lo haces porque sabes que para ella es algo importante y entonces lo usas como chantaje/castigo, o porque genuinamente no tienes ganas de darle teta cuando te rasguña la cara?

  • paty dice:

    Tengo dos hijos de diferentes edades 6 y 11 años ! En casa no acostumbramos castigar ! Lo que hago con la pequeña es bajar a su nivel y explicarle lo que se siente con su comportamiento decirle que confío en ella y que se que no volverá a ocurrir ! Con el mayor es aún más sencillo pues desde pequeño se manejo de la misma forma y ahora ya casi adolecente es un niño seguro y me hace sentir mucha confianza en el ! Por supuesto que al principio fue difícil y aun hoy soy muy criticada por estilo de crianza ! Pero no me importa !! Sus sonrisas llenan mi vida!

  • Krissia Portorreal dice:

    Hablar, es la única manera. Pero también hay que poner límites.

  • Pepa dice:

    Hola, he estado hablando con mi hijo y hemos hecho un trato respecto a qué hacer cuando se enfada por no conseguir lo que quiere. Si es en casa, dirá que está enfadado y tirará un cojín al suelo, y si está fuera dirá lo mismo y respirará hasta que se calme .Es nuestro trato, yo respetaré su enfado y él nuestro trato. Es mi alternativa al castigo cuando me desafía enfadándose y sentándose inmóvil en el suelo, esté donde esté.

  • Belén dice:

    Al igual que los adultos, los niños cuando tienen un comportamiento alterado, es porque algo no va bien. Necesitan apoyo, calma, comprensión… y un adulto que identifique la situación y les ayude a canalizar. Para mi se trata más de lo que «no debemos hacer» que de lo que debemos. Alterarnos nosotros por ejemplo, es contraproducente.

  • Natalia dice:

    Le dejaría q se tranquilizase y después de tranquilizarme yo también intentaría hablarle de lo q ha hecho.

  • Emma dice:

    Cuando una madre castiga ( o no premia, según se mire) ha pasado ya infinitas veces por hablar, conversar, hacerle entender, comprender…
    Cuando esto se convierte en rutina deja de tener su efecto, y por lo tanto éxito.

  • Mabel dice:

    Me sentaría a su lado para explicarle que su comportamiento no es correcto y, que por lo tanto, mamá no está contenta. Le preguntaría por qué hace lo que hace y le explicaría por qué no debe volver a hacerlo

  • Palma dice:

    Le diría que estoy muy enfadada por su comportamiento y pienso que ambos necesitamos calmarnos (por separado o juntos); cuando hubiera pasado la tormenta, le explicaría cómo me sentí cuando hizo lo que fuera, que no resolvemos problemas pegando y le preguntaría cómo se siente él y si tiene alguna idea para evitar enfadarse tanto por lo que sea la próxima vez y cómo puedo ayudarlo mejor.

  • Virginia dice:

    Creo que cualquier » mala acción» tiene que tener una respuesta de cariño

Responder

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies