¿Hay que compartir?

“Déjaselo al nene. Hay que compartir”. Esta es la frase más utilizada por las mamás y abuelas que me encuentro cada día en el parque. Y creo que entiendo lo que hay detrás de ese mensaje: miedo a que tu hijo se convierta en un egoísta impresentable cuando sea mayor; miedo a que nunca aprenda a compartir, a que siempre sea un egoista. O tal vez miedo a la mirada (juicio) de las otras mamás.

Pero debes comprender el momento evolutivo en que se encuentra tu hijo. Dicho de otro modo, que un niño de hasta 3 años no quiera compartir sus cosas es totalmente normal. Y lo indeseable es obligarle a hacerlo. Porque no puede.

¿Y por qué no? Porque a esa edad no puede ponerse en la piel del otro. Está en la etapa egocéntrica de su desarrollo, en la que él es el centro del universo y solo entiende lo que siente él, no lo que sienten los demás. La mayoría de niños no aprende a compartir hasta al menos los 4 ó 5 años. Así que no te precipites y, por descontado, no lo castigues ni le obligues a compartir su precioso camión porque lo único que conseguirás es lo contrario de lo que pretendes. Además, no tiene que compartir algo especial que no quiera compartir… ¿o acaso tú lo haces?

Algunas ideas para ayudar a tu hijo a practicar el compartir

  1. Si un amiguito va a venir a casa, puedes dejar que tu hijo escoja aquellos juguetes que no quiere compartir porque sean especiales para él en ese momento. El resto sí los compartirá.
  2. Cuando veas que está compartiendo, díselo: “Me gusta que le hayas dejado tu coche a fulanito”.
  3. Dile que entiendes que para él debe de resultar muy difícil compartir. Dile que cogerle algo a alguien no es la mejor opción y ofrécele alternativas, como ayudarle a escoger otro juguete mientras espera su turno. Acompáñalo en su espera.
  4. Sírvele de ejemplo. Demuestra generosidad compartiendo cosas tuyas con él y con otras personas.
  5. Fomenta el juego cooperativo. Elige juguetes que puedan ser usados por más de un niño (legos, cacharritos…) Haz, por ejemplo, torres de piezas con tu hijo poniendo una pieza cada uno por turnos para que aprenda a esperar. No es fácil para un niño esperar.
  6. Pídele que elija un juguete para otro niño. Eso pone el foco de atención en la amistad, no en el objeto.
  7. Cuando tu hijo sea un poquito mayor, si se está peleando con otro niño por un juguete, pregúntale cómo puede resolver el problema. Es decir, que él aporte ideas para resolver el conflicto.
  8. Déjale libertad para que juegue con su juguete hasta que se canse.  Así estará mucho más dispuesto a darle el juguete a otro niño por voluntad propia. Es mejor que no seas tú quien decida que “ya es suficiente, ahora le toca a fulanito” y le quites su juguete de las manos para dárselo a otro niño. Porque recuerda que tu hijo aprende de tu modelo. Si tú le quitas algo de las manos, él también lo hará con otro niño después, justo lo que no deseas que ocurra.
  9. Enséñale asertividad. A menudo veo niños que no dicen nada cuando otro niño les quita su juguete a pesar de que es evidente que se enfadan (a mi propio hijo le ocurre a veces). Entonces es cuestión de que le enseñes asertividad en casa. Que aprenda a decirle al otro niño: “Ahora estoy jugando yo”. La asertividad es una habilidad esencial tanto para su vida presente como futura.
  10. Explícale cuentos que enseñen el valor y las ventajas de compartir. (En la newsletter de este mes de marzo compartiré, nunca mejor dicho,  un cuento contigo; apúntate ahora si aún no lo has hecho).

Y ahora te toca a ti. ¿Qué ideas usas para enseñar a tu hijo a compartir? ¿Cuál es tu miedo al ver que tu hijo no comparte? ¿Te ha aportado algo nuevo este artículo?

Si te ha gustado, compártelo con una amiga que lo esté necesitando.

Un cálido abrazo y hasta la semana que viene.

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Marzo 13, 2013

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Susana - Septiembre 17, 2013

Hola!
Mi niña de 18 meses es muy impulsiva y quiere todo lo de los demás, lo de ella lo deja a un lado. No le importa que se lo cojan porque ella quiere lo de los otros niños. Ha empezado a la guardería y es la más pequeña de la clase: con la siguiente se lleva 6 meses; por lo tanto, la diferencia con los demás es notable. Ahora, en el parque me encuentro con un problema y no sé cómo gestionarlo. Las otras mamás no le dejan los juguetes de sus hijos, aunque en esos momentos no estén usándolos. Yo pienso que compartir es bueno, yo te dejo lo mío y tú lo tuyo, pero con estas madres parece que no. Al final me veo quitándole el juguete a mi hija, ya que ya nos han dado un NO rotundo, ella pasa un mal rato y yo otro tanto. ¡Al final opto por llevármela a otro sitio y jugar allí, solo por evitar el enfado, la rabieta y los gritos de mi niña!

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Elena - Marzo 14, 2013

Hola!
Yo siempre respeto el juguete con el que esté jugando. A mí tampoco me gustaría prestarlo!
Pero a veces mi hija (3 añazos) se pone toda nerviosa a coger todos los juguetes que tiene cerca para que no los coja el hermano (1 y pico añazos). Entonces yo le digo que está bien, que si ella no quiere compartir no pasa nada, pero que entonces tampoco podrá coger los de su hermano. Oye, ¡y suele funcionar!

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Aitana - Marzo 13, 2013

Holita:
De verdad no sabía que estaba en etapa egocéntrica y todo esto que explicas. Yo pensaba que fomentar el compartir no tenía nada de malo.
Cuanto más tiempo pasa más cuenta me doy de que para ser madre debería existir una carrera universitaria con dos masters al menos 🙁
A Inés sí le sale compartir la comida con otros y con nosotros, pero los juguetes es otro tema. Ella coge los de todo el mundo y luego no comparte ninguno de los suyos. Y yo la corregía. Le decía: Si tu juegas con X de Pablito tienes que prestarle H tuyo.
Pensé que estaba haciéndolo bien. ¡Qué bajon!

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    Olga Marín - Marzo 13, 2013

    Jaja, tranquila, Aitana, que todas aprendemos todos los días el duro oficio de la maternidad. Pues ya lo sabes, tu hija es muy pequeña aún y no va a compartir durante bastante tiempo. Todo normal.
    Un abrazo.

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